Las cuentas de redes sociales del ámbito de la salud pueden operar como una plataforma de atención al cliente, así también como canal de información sobre determinadas enfermedades.
Un estudio elaborado por Demi & Cooper Advertising y DC Interactive Group muestra que más del 90% de las personas entre 18 a 24 años de edad confía en la información de salud que se encuentran en redes sociales. Asimismo, las cifras indican que uno de cada dos adultos utiliza su smartphone para informarse sobre temas de la salud.
Ante esta gran masificación del HealthCare Marketing, surge la necesidad de establecer estrategias efectivas y determinar el límite entre diagnosticar y aconsejar a través de estos medios. Este último aspecto es de vital importancia, ya que implica la salud de los usuarios.
Punto de partida: determinar el target
En las redes sociales digitales, ya sea en cuentas de salud y en general, el primer paso es determinar un público meta para establecer una estrategia a seguir. Este target group está directamente relacionado con los objetivos del cliente con su marca y su presencia en redes sociales. Esta estrategia se determina, pensando siempre en el público objetivo, en base a un enfoque comunicacional que permita tanto la interacción de los usuarios como alcanzar los objetivos del cliente en Social Media.
Tras este análisis, es posible determinar los temas que se contemplan dentro de las pautas de contenido, los cuales construirán el estilo de la página -o cuenta- y permitirán brindar información relevante para los usuarios.
Responsabilidad es fundamental
Para llevar a cabo una estrategia de marketing digital efectiva- y sobre todo ética- en perfiles de salud de redes sociales, es fundamental contar con un equipo profesional capacitado en Social Media.
Luis Chew, Social Media Manager en Alianza, sostiene que la responsabilidad en las cuentas de salud es un tema de gran relevancia y que requiere de una atención especial, ya que existe una delicada línea entre aconsejar y diagnosticar. “Esta diferencia debe ser considerada en todo momento, ya que cobra un importante papel al momento de interactuar con los usuarios y de seleccionar los temas a publicarse”, asegura.
El profesional afirma que desde las redes sociales es imposible otorgar un diagnóstico certero del paciente, por tanto, también es inadmisible recetar cualquier tipo de medicamento. “Las redes sociales digitales deben verse como un canal de comunicación con el paciente para brindar mayor cercanía, nunca como una extensión del consultorio, donde se puede recetar o diagnosticar. Es precisamente este aspecto el que debe cuidarse al momento de manejar este tipo de cuentas”, argumenta.
“Considero que la responsabilidad y la ética profesional son justamente algunos de los aspectos más importantes en Social Media, sobre todo si hablamos de Health Care, ya que además de estar en juego el prestigio de la marca, está en juego la salud de los usuarios”, concluye el experto.
